La técnica PRK fue inventada a principios de la década de los 80. En 1995 fue aprobada por la FDA como la técnica segura para la corrección de problemas de miopía, astigmatismo e hipermetropía.
En los pacientes con miopía, el objetivo es aplanar la córnea demasiada curvada. La técnica permite tratar miopías bajas, entre 0,75 y 2 dioptrías, a veces más, pero no está recomendada en miopías superiores a 6 dioptrías.
Esta técnica de cirugia refractiva es muy similar al Lasik, con la diferencia importante de que en este caso no se realiza un corte en la cornea durante la intervencion. El cirujano oftalmologo elimina capas del epitelio corneal para después aplicar sobre la zona el haz láser.
Esta diferencia es la que provoca que el post-operatorio de esta técnica sea bastante doloroso y que la zona operada reste protegida mediante lentes de contacto blandas. Normalmente hacen falta unas 48h para que el epitelio corneal se regenere.
La ventaja frente al Lasik es que no hay riesgos relacionados con la fase de corte y que la integridad del globo ocular es preservada ya que la foto-ablación es bastante ligera. Sin embargo, la recuperación visual es más larga, hasta pasados 10 o 15 no se recupera una visión óptima.
Video Cirugía Refractiva técnica PKR
La cirugía láser PRK (Photorefractive Keratectomy) es un procedimiento de corrección visual mediante láser utilizado para tratar problemas refractivos como la miopía, la hipermetropía y el astigmatismo. Es una de las primeras técnicas de cirugía refractiva desarrolladas antes de que se popularizara el procedimiento LASIK. Aunque hoy en día las opciones como LASIK suelen ser más conocidas, la PRK sigue siendo una opción válida y efectiva, especialmente para personas con córneas más delgadas o que no son candidatas para LASIK.
¿En qué consiste la cirugía refractiva PRK?
El procedimiento PRK utiliza un láser excímer para remodelar la córnea, que es la parte transparente y frontal del ojo responsable de enfocar la luz que llega al ojo. El objetivo es modificar la forma de la córnea para mejorar el enfoque de la luz en la retina y corregir problemas de visión como miopía (dificultad para ver de lejos), hipermetropía (dificultad para ver de cerca) y astigmatismo (visión borrosa o distorsionada).
A continuación te explico los pasos del procedimiento:
Preparación:
- Se administra una anestesia tópica en forma de gotas para adormecer la superficie ocular, de modo que el procedimiento sea indoloro.
- Se coloca un dispositivo para mantener el ojo abierto y evitar el parpadeo durante el procedimiento.
Eliminación del epitelio corneal:
- En la PRK, a diferencia del LASIK, no se crea un colgajo (flap) en la córnea. En lugar de eso, el primer paso es eliminar el epitelio corneal (la capa más externa de la córnea) de forma delicada. Esto puede realizarse con un láser o con un pequeño instrumento quirúrgico.
Aplicación del láser excímer:
- Una vez que el epitelio ha sido retirado, el láser excímer se utiliza para remodelar la forma de la córnea. Dependiendo del tipo de error refractivo (miopía, hipermetropía o astigmatismo), el láser elimina una cantidad específica de tejido corneal para ajustar la curvatura y permitir un enfoque más preciso de la luz en la retina.
Curación:
- Tras la remodelación corneal, el epitelio crece de nuevo de manera natural. Aunque este proceso es lento (alrededor de 3-5 días), en este tiempo el ojo comienza a sanar y la visión mejora progresivamente.
Protección:
- En muchos casos, se coloca un lente de contacto terapéutico durante el proceso de curación para proteger el ojo mientras el epitelio se regenera. Este lente se retira cuando el ojo está lo suficientemente curado.
Ventajas de la cirugía PRK
- Adecuado para córneas finas: PRK es una opción ideal para personas que tienen córneas demasiado finas o problemas de grosor corneal que las hacen inapropiadas para LASIK, ya que no se realiza un corte profundo como en el LASIK.
- Menos riesgo de complicaciones relacionadas con el flap: Como PRK no utiliza un colgajo corneal, no existe el riesgo de complicaciones relacionadas con el flap (como desplazamiento o infecciones), que pueden ocurrir en el procedimiento LASIK.
- Resultado a largo plazo: PRK ofrece resultados estables a largo plazo y puede ser muy efectivo en pacientes con miopía, hipermetropía o astigmatismo.
Desventajas y consideraciones del laser PKR
- Tiempo de recuperación más largo: En comparación con el LASIK, la recuperación de PRK suele ser más lenta y dolorosa. El proceso de curación de la córnea tarda más, y la visión puede ser borrosa o fluctuante durante los primeros días o incluso semanas.
- Molestias postoperatorias: Durante la primera semana después de la cirugía, muchos pacientes experimentan dolor, irritación, sensibilidad a la luz, y lagrimeo excesivo. El uso de medicamentos y gotas oftálmicas para reducir la inflamación y el dolor es común.
- Requiere más tiempo para estabilizarse: La visión no suele estabilizarse de inmediato, y puede pasar de varios días a varias semanas (incluso hasta un mes) antes de que la visión alcance su nivel máximo de claridad.
- Requiere seguimiento cercano: Los pacientes deben asistir a varias consultas postoperatorias para asegurarse de que la curación esté progresando adecuadamente y para monitorear cualquier posible complicación.
¿Es PRK adecuado para ti?
PRK es una opción efectiva para muchas personas, pero no es adecuado para todos. Los candidatos ideales para PRK suelen ser:
- Personas con miopía, hipermetropía o astigmatismo.
- Pacientes con córneas finas o que tienen otras características que les impiden someterse al LASIK.
- Personas que no tengan problemas oculares importantes (como cataratas o enfermedades graves de la córnea).
- Pacientes que no estén dispuestos o no sean candidatos para las incisiones creadas durante LASIK.
Para determinar si PRK es la mejor opción para ti, es crucial consultar con un oftalmólogo especializado en cirugía refractiva. El médico realizará una evaluación exhaustiva de tu salud ocular, el grosor y la forma de tu córnea, y otros factores para recomendar el tratamiento adecuado.
¿Cuánto tiempo dura la operación?
La cirugía PRK suele ser rápida, tomando solo entre 10 a 15 minutos por ojo. Sin embargo, el proceso de preparación, la anestesia y el tiempo de recuperación inicial puede hacer que la visita total dure entre 1 y 2 horas.
Resultados del laser PRK
Los resultados de la cirugía PRK son generalmente muy satisfactorios. Los pacientes que se someten a PRK suelen experimentar una mejora significativa en su visión, con una alta tasa de éxito en la corrección de problemas refractivos. Sin embargo, como con cualquier cirugía, los resultados pueden variar, y algunas personas pueden necesitar un procedimiento adicional o correcciones menores.
Recuperación y cuidado postoperatorio
- Inmediatamente después de la cirugía: Puede haber cierta incomodidad, visión borrosa, sensibilidad a la luz y lagrimeo excesivo durante los primeros días.
- Primeras semanas: Se recomienda evitar frotarse los ojos y tomar precauciones adicionales como usar gafas de sol para protegerse del deslumbramiento.
- Gotas oftálmicas: Los pacientes deben usar gotas para ayudar a la curación y prevenir infecciones.
- Evitar actividades intensas: Durante las primeras semanas, se debe evitar nadar, hacer ejercicio intenso o exponerse a ambientes polvorientos o húmedos.
En resumen, PRK es una opción segura y eficaz para la corrección de la visión en muchas personas, especialmente aquellas con córneas finas. Aunque la recuperación es más larga y puede ser más incómoda que otros procedimientos como el LASIK, los resultados a largo plazo son altamente satisfactorios para aquellos que buscan una solución permanente a problemas refractivos.
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