Los anillos intracorneales representan un modo de corrección muy utilizado en la cirugía del queratocono. Se trata de segmentos de plástico cilíndrico que se colocan dentro de la cornea en forma de un anillo completo o un semi-anillo, según el caso, mediante cirugía y que van a corregir la curvatura anomala de la cornea debida al queratocono.
Una solución al queratocono
El tratamiento con anillos intracorneales corrige, de forma parcial o total, el astigmatismo que es propio del queratocono, mejorando la agudeza visual.
El tratamiento con anillos intracorneales también regulariza la forma de la cornea, aplanándola y haciendo más fácil el uso de las lentes de contacto.
Los anillos intracorneales se colocan mediante cirugía bajo anestesia con gotas y el paciente puede volver a su vida cotidiana aproximadamente a los cuatro días de la operación.
La operación consiste en realizar dos semi-túneles en la cornea mediante la utilización de un láser femtosegundo. A continuación se introducen los anillos a través de una pequeña incisión periférica realizada a dos tercios del espesor de la cornea.
La operación dura entre 10 y 15 minutos. Una de las ventajas de esta técnica es que los anillos intracorneales pueden ser retirados sin dificultad en caso necesario, y la cornea recupera su forma inicial.
Vídeo cirugía refractiva implantación Intacs
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