Distribuidores automáticos de gafas 3D

«Whoau”, esta es la expresión que mas de un cliente se le escapa cuando entra en un cine y se encuentra de frente con un distribuidor automático de gafas, en concreto de gafas 3D. Como de costumbre este tipo de novedades nos llegan del otro lado del Atlántico, en concreto estos distribuidores, creados por la filial americana de Marchon, ya están instalados en algunos cines californianos.

¿En que consiste?

Muy sencillo, con la democratización (obligada, todo hay que decirlo) de las películas 3D algunos fabricantes de monturas han visto en esta nueva forma de ocio un enorme filón.

Mi análisis es el siguiente: ¿Por qué el consumidor no compraría un producto de calidad y con diseño para disfrutar de las películas 3D, teniendo sobre todo en cuenta que asistir a uno proyección de este tipo se esta convirtiendo en un estándar y que la persona vendrá al cine la próxima vez ya equipado con su propia gafa?

Si como yo pensáis que la respuesta es: “no hay ninguna razón para que no lo haga”, pues es fácil de entender el gran interés de los fabricantes de monturas por imponer sus diseños, además del interés que estas empresas tienen de ponerlos de la forma mas rápida y simple al alcance del consumidor final.

Así lo han debido de entender la filial americana de Marchon y por esa razón han puesto a disposición de esos clientes amantes de la 3D, unos distribuidores de monturas que están instalados en los mismos cines donde ellos irán a disfrutar de la proyección.

Marchon pone a disposición de estos cinéfilos la colección de monturas EX3D que cuenta con 25 modelos de gafas 3D pasiva para hombre, mujer y niño. Los precios son, como muchas de las películas, para todos los públicos y varían desde los 22 y los 30 dólares para los modelos normales y hasta 70 dólares para las monturas en edición limitada (aquí veis reflejado otro de mis caballos de batalla, la personalización).

Por cierto, este tipo de quioscos de gafas están en plena expansion: No compre gafas en una óptica, cómprelas en cualquier lugar

Las gafas están dotadas de una tecnología RealD3D, son compatibles con todos los cines que proyectan películas en 3D (veis ahora lo que os comentaba antes) y también con la mayoría de los sistemas que proponen emisiones en 3D pasiva como la televisión o los videojuegos.

Pero aun hay mas amigos…

Lo primero es que las lentes de estas gafas 3D proporcionan protección frente a la radiación UV, lo que también permite al cliente usarlas como unas gafas de sol fuera del cine.

Lo segundo es que Marchon propone también un servicio especial para todos aquellos clientes amétropes que deseen poder disfrutar de las emisiones 3D, claro esta, usando sus productos.

Es un tema que ya se ha evocado repetidas veces en el blog, me refiero a la personalización de los productos ópticos y el impacto de las nuevas tecnologías en nuestro modelo de negocio actual, ya veis que pasito a pasito nos vamos (o mejor dicho, nos van llevando) en esa dirección.

Me gustaría conocer vuestros puntos de vista sobre el impacto de todos estos cambios que ya están a la vuelta de la esquina.