Hoy os voy a hablar de una nueva técnica que podría mejorar las tasas de éxito de un trasplante de cornea en pacientes que actualmente son considerados como de alto riesgo para este tipo de operaciones.
En esta investigación, publicada en Scientific Reports (link al final del post), antes de la intervención las córneas de los donantes fueron tratadas con una combinación de citocinas, para después ser utilizadas en un ensayo de trasplante corneal utilizando ratones.
Para los que como yo nunca habían oído hablar de estas moléculas, que sepáis que las citocinas son un grupo de proteínas y glucoproteínas producidas por diversos tipos celulares que actúan fundamentalmente como reguladores de las respuestas inmunitaria e inflamatoria.
Ocho semanas después del trasplante, los investigadores observaron una tasa significativamente mayor de supervivencia del injerto en ratones que habían recibido las córneas tratadas con citocinas (68,7%) en comparación con un grupo de control y que no recibió corneas tratadas, en el que ninguno de los injertos sobrevivió.
Para el autor principal del estudio, el Dr. Reza Dana, estamos ante un gran avance para mejorar las operaciones de transplante corneal. «Es una tecnología altamente reproducible», enfatizó.
«Cuando se injertó el tejido tratado con citocinas, se desarrolló una tolerancia al injerto, lo que conduce a la aceptación a largo plazo del trasplante de la córnea y suprime los efectos secundaros de la inmunidad, que es la principal causa de rechazo en este tipo de cirugías», concluyó el Dr. Dana.
Aproximadamente un tercio de los casos de trasplante de la córnea son «de alto riesgo», con una mayor probabilidad de rechazo del injerto incluso cuando se utilizan esteroides para suprimir la reacción del sistema inmunológico.
Link al estudio: Treatment of donor corneal tissue with immunomodulatory cytokines: a novel strategy to promote graft survival in high-risk corneal transplantation