La amenaza de ceguera disuade a los fumadores mucho más eficazmente que cualquier otra advertencia relativa a los demás riesgos para su salud que puede provocar el tabaco, esta es una de las conclusiones de un nuevo estudio publicado recientemente en Inglaterra.
Los investigadores, que presentaron sus hallazgos en la reunión de la Sociedad Torácica Británica a principios de diciembre, mostraron que según su estudio existe un escaso conocimiento de la relación entre tabaquismo y ceguera. Sin embargo, cuando el consumidor se da cuenta de esta peligrosa asociación, el «impacto disuasivo es mucho mayor» y provoca una reducción del consumo de tabaco.
El estudio fue dirigido por el Dr. Culadeeban Ratneswaran del Guy’s and St Thomas Hospital. Los investigadores constataron una reducción de la sensibilidad y toma de conciencia de los fumadores a las advertencias sanitarias a las que están expuestos, de forma grafica o texto, en los paquetes de tabaco. La razón es que terminan por acostumbrarse a ellas y al final “dejan de verlas” o “darles importancia”.
En el estudio participaron un total de 266 personas repartidas entre Londres (163) y Singapur (103). El grupo de Londres contaba con 56 pacientes que eran fumadores y Singapur contaba con 55.
Los investigadores se encontraron con que los participantes del Reino Unido presentaban una mayor concienciación sobre el riesgo de que fumar aumenta la probabilidad de sufrir enfermedades cardíacas, así como cáncer de boca o garganta y el cáncer de pulmón. Sin embargo, los fumadores de la muestra tenían una conciencia significativamente menor del efecto del tabaquismo sobre la visión y el riesgo de ceguera.
En Singapur, donde estos mensajes de advertencia se incluyeron en los paquetes de tabaco cinco años antes que en Inglaterra, los resultados mostraron que los niveles de rechazo a estos mensajes eran mucho más bajos que en Inglaterra.
Según el Dr Ratneswaran: «las advertencias sanitarias gráficas en los paquetes de cigarrillos han desempeñado un papel importante en la comunicación de mensajes sobre los peligros de fumar. Nuestra investigación muestra que este efecto puede disminuir con el tiempo y que ambos elementos de advertencia, imágenes y mensajes, necesitan ser renovados cada cierto tiempo para asegurarse que conservan su impacto preventivo.
«Hemos demostrado también que las advertencias cuanto mas simples y sencillas sean, mayor es su impacto emocional y por tanto, pueden funcionar mucho mejor.»
Link al estudio: http://thorax.bmj.com/