Por fin, la solución perfecta que todos los padres buscan para poder poner unas gafas de sol a sus bebes sin que la aventura se convierta en una pesadilla: el niño no las quiere, no tiene suficiente nariz, le vienen grandes, se las quita, etc.
En este caso combinar un chupete y una gafa de sol es una idea perfecta, seguro que no habrá ningún niño que se atreva a quitarse las gafas ya que también se quitará el chupete y ahí está el truco, ya que como saben todos aquellos que como yo somos padres de niños pequeños se trata de un precio muy alto a pagar para nuestros pequeños “adictos” al chupete.
Otra cosa es el look del equipo completo, pero como para gustos hay los colores os dejo a vosotros decidir si el beneficio vale la “penitencia”.
Curioso cuanto menos, y parecía que se había inventado todo y zas!, sorprendidos por el chupete – gafas. Quizás un poco raro pero si merece la pena para lo mas peques ok.
¡Qué genial idea! Me encanta