Prescribir lentes monofocales para visión de lejos a personas mayores que normalmente utilizan lentes progresivas para compensar su vista cansada y que regularmente practican actividades al aire libre es una solución simple y efectiva para prevenir caídas. Esto no me lo invento yo, es la conclusión de un estudio publicado en el British Medical Journal.
Sin embargo, el estudio también llega a la conclusión de que esta estrategia no es apropiada para personas mayores menos activas y que pasan la mayor parte de su tiempo en casa.
Después de leer el protocolo del test y los resultados a los que llegan estos científicos, los cuales podréis encontrar a continuación, mi opinión es que este estudio no aporta realmente nada nuevo, nada que no conociésemos.
¿Por qué opino esto?
De todos es sabido que uno de los mayores problemas de los usuarios de lentes progresivas, sobre todo para aquellos que comienzan a utilizarlas por primera vez a causa de la vista cansada, es la visión dinámica y las nuevas costumbres que deben adoptar para usar estas lentes en su vida cotidiana, sobre todo si anteriormente usaban monofocales. Sin ir más lejos, bajar escaleras es uno de los factores de riesgo más importantes para estos nuevos usuarios de lentes multifocales.
El otro elemento que sería importante conocer sobre el protocolo seguido es la repartición entre lentes progresivas, bifocales y trifocales (estos dos últimos tipos de lentes son aun bastante utilizados en los países anglosajones).
En el caso de las lentes progresivas además sería interesante conocer su marca comercial, ya que eso nos daría una pista sobre si el diseño de la lente era un diseño progresivo “duro” o “blando”, lo que es un factor bastante importante para analizar los resultados del estudio, ya que hablamos de una actividad dinámica en la cual el diseño de la lente progresiva puede jugar un papel importantísimo.
Aun así, yo os dejo sacar vuestras propias conclusiones.
A continuación encontrareis una transcripción del artículo así como un link con la fuente de donde lo he sacado.
“La presbicia (disminución progresiva de la capacidad para enfocar nítidamente objetos en visión de cerca) es el problema visual más común entre las personas mayores.
Cuando una persona tiene vista cansada, para restituirle una buena visión de cerca existen dos métodos: un par de gafas con lentes monofocales para cerca y otro par de gafas con el mismo tipo de lentes para lejos si la presbicia está asociada a otra ametropía (miopía, hipermetropía y/o astigmatismo), o bien, un par de gafas con lentes multifocales (bifocales, trifocales o progresivos).
Más información: Presbicia o vista cansada: qué es, causas, sintomas y cómo se corrige
De todos son conocidas las ventajas de las lentes progresivas, que podríamos resumir en “un solo par de gafas para realizar todas sus tareas cotidianas”, aunque también conocemos sus limitaciones, mayores o menores en función de su calidad, como las aberraciones y las transiciones de potencia que en personas mayores pueden aumentar el riesgo de caídas o la dificultad de adaptación.
El estudio
El estudio ha sido realizado por investigadores australianos y demuestra que prescribir a aquellos usuarios de lentes multifocales un equipamiento suplementario consistente en unas gafas con corrección de lejos para que las usen en actividades al aire libre o en situaciones inhabituales contribuye a reducir el riesgo de caídas.
En el estudio participaron 606 personas elegidas entre aquellas que presentaban un riesgo de sufrir caídas más elevado (aquellas cuya edad sobrepasaba los 80 años, así como aquellas personas mayores de 65 años y que ya habían sufrido caídas anteriormente). Todos los participantes ya eran usuarios de lentes multifocales, al menos las usaban tres veces por semana cuando caminaban al aire libre y no usaban ningún equipamiento monofocal para visión de lejos.
Los participantes fueron separados de forma aleatoria en dos grupos, un grupo de test y otro de control. Después de un examen visual, 305 participantes fueron equipados con un par de gafas unifocales para visión de lejos que debían utilizar durante sus actividades al aire libre y en situaciones inhabituales. Estos usuarios recibieron informaciones relativas al uso de su nueva corrección monofocal y sobre las razones por las cuales las lentes multifocales pueden aumentar el riesgo de caídas.
El grupo de control también paso el mismo examen visual que el grupo de test, pero en este caso no recibieron ningún par de gafas monofocales para lejos ni tampoco informaciones para prevenir el riesgo de caídas con lentes multifocales.
La duración del estudio fue de trece meses, durante los cuales, el total de caídas en el grupo de test se redujo un 8% comparado con el grupo de control. En el caso de aquellos participantes que antes del estudio realizaban regularmente actividades al aire libre, el número de caídas y de heridas asociadas a las mismas se redujo casi en un 40%. Sin embargo, para aquellos otros que normalmente pasaban su tiempo en casa, el número de caídas al aire libre se incremento significativamente durante el estudio.”
Fuente : British Medical Journal