Gafas de sol de marca y el periodista

Un artículo sobre gafas de sol interesante, aunque desgraciadamente el periodista que lo escribe pierde toda su credibilidad cuando decide hablar sobre temas que no conoce lo suficientemente bien, sobre todo si se permite el lujo de dar por sentado informaciones y datos que están lejos de la realidad.

El peligro de este tipo de artículos es la falta de objetividad y su visión sesgada, ya que quienes los lean pueden pensar que este periodista sabe de lo que habla, y podéis creerme, está muy lejos de saber del tema. En otras palabras, no tiene ni idea sobre el mercado óptico y los fabricantes de gafas de sol.

Os dejo leer el artículo, a lo largo del mismo yo he dejado varias preguntas que me gustaría que este periodista respondiese y le dejo mis comentarios sobre lo que ha escrito en el mismo. Con toda probabilidad no los leerá, pero permitirá a otros reflexionar sobre lo que ha escrito.

Es un poco largo pero merece la pena, leerlo. Por cierto, lo olvidaba, el artículo fue publicado en un diario Mexicano.

Artículo:

¿Está buscando un nuevo par de gafas de sol?

Uno puede gastar cientos de dólares en su próximo par de anteojos. Algunos de Prada y Bulgari cuestan cerca de 500 dólares, y eso es si no necesita lentes recetados. Incluso marcas más modestas como Ray-Ban o REVO pueden costar 200 dólares o más.

Las gafas de diseñador son un gran negocio, incluso en la actual economía. Sigo oyendo hablar sobre la nueva era de la frugalidad, pero no lo percibo en los centros comerciales. Las ventas en tiendas abiertas por lo menos un año subieron 10,8% en el primer trimestre y casi borraron el bajón de principios de 2009.

(Esto depende del país, evidentemente no es el caso de la mayoría de los países, sobretodo España)

¿Pero valen la pena las marcas caras? ¿Son mucho mejores que, por ejemplo, los anteojos de 25 dólares que puede conseguir en su farmacia local?
Con todo el respeto para los farmacéuticos, una farmacia no podrá nunca ofrecer la variedad y la calidad de gafas que pueden encontrarse en una óptica.
Antes de gastar mucho dinero en su próximo par de gafas de sol de diseñador, considere estos seis puntos:

1.-    La mayoría de los anteojos de sol son fabricados por la misma empresa. ¿Prefiere la «calidad» de Ray-Ban a la de Oakley? ¿Piensa que Bulgari es mejor que Dolce & Gabbana, o que Salvatore Ferragamo es superior a Prada? Despierte. Todas las gafas son producidas por una empresa, el fabricante italiano Luxottica, una de las mayores compañías de productos de consumo de la que la gente nunca ha escuchado. Luxottica también hace anteojos de sol para las marcas Burberry, Chanel, Polo Ralph Lauren, Paul Smith, Stella McCartney, Tiffany, Versace, Vogue, Persol, Miu Miu, Tory Burch y Donna Karan.

(  Cierto que Luxottica fabrica muchas de las gafas de marca que se venden, pero no son los únicos. Hay muchas empresas que ofrecen productos de excelente calidad y no tienen en su cartera marcas tan conocidas como las de la italiana.
¿Conoce este señor a Alain Mikkli, Silohuette, Theo, Minima, Rudy Projet y un larguísimo etc?

Además, ¿Qué más da quien fabrique la gafa si de lo que hablamos es de calidad y protección para el usuario? En el caso de Luxottica, Safilo, Marchon y otros grandes, podemos estar seguros que sus productos respetan ambas cualidades.   )

«Producimos cerca de 70% de esas marcas en nuestras fábricas en Italia, y el resto en Estados Unidos y China», afirma el vocero de Luxottica Luca Biondolillo. «Hacemos el diseño, la fabricación y el marketing», agrega. La empresa produce la mayoría de esas marcas bajo licencia, trabajando de cerca con diseñadores de las casas de moda, pero también es propietaria de varias como Ray-Ban, Oakley, Oliver Peoples y REVO.

2.-    En muchos casos, la misma empresa también vende las gafas. Luxottica es dueña de las tiendas LensCrafters, Pearle Vision y Sunglass Hut. Esta es una integración vertical extrema. El oftalmólogo que le dice que necesita un nuevo par de anteojos, los vendedores que le ayudan a elegirlos, y la gente que diseña y fabrica las gafas trabajan para la misma compañía. Saque sus propias conclusiones, pero si su asesor financiero fuera un empleado de la empresa de fondos de inversión que él mismo le recomendó para su portafolio, al menos le gustaría saberlo.


(  Cierto en unos países, falso en otros. Ahora bien, no olvidemos que la publicidad y la notoriedad de estas marcas, conseguidas gracias a la inversión en publicidad que realizan sus fabricantes (al igual que pasa con las lentes oftálmicas y las lentillas) favorece a todo aquel que decide vender estos productos.  )

3.-    Los sobreprecios son tan grandes como parecen. Siempre que compro un nuevo par de anteojos regulares, siento que recibo muy poco a cambio de mi dinero. Puedo llegar a entender por qué los lentes son tan caros, ya que el material tiene que ser producido y pulido con precisión. ¿Pero 100 dólares ó 200 dólares por el armazón? Son sólo trozos de metal o plástico moldeado.
El costo de un nuevo par de anteojos, por supuesto, reflejará los materiales y la mano de obra. No obstante, el precio también refleja el valor de la marca y el marketing, y cuánto pagarán los consumidores. Luxottica señala que obtiene una ganancia bruta de 64 centavos por cada dólar en ventas. Aun después de deducir los costos de venta y publicidad, gastos generales y regalías por licencias de marcas, gana 52 centavos por cada dólar, lo que representa un gran margen.


(   ¿Qué opina el periodista de Appel, Mircrosoft, Pfizer, Unilever, Wallmart, Carrefour, etc? ¿Y de los bancos, o las empresas de telefonía? ¿Sus márgenes son menores? ¿Se trata de empresas altruistas? Todos ellos son empresas que funcionan siguiendo las mismas reglas que el sector óptico. Seamos realistas y no sesgados.    )


Pese a que su rendimiento sobre el capital ha disminuido desde que empezó el enfriamiento económico mundial, la compañía logró el año pasado un respetable 11%, según datos de FactSet Research Systems. Hace unos años, esa cifra llegaba a 20%. Además, los inversionistas confían en el futuro de la empresa. La acción se ha disparado a 25 dólares desde sus mínimos del año pasado de cerca de 13 dólares.


4.-    Asimismo, esas gafas caras pueden no ser mejores para sus ojos. «Los anteojos de 300 dólares dólares no hacen nada mejor que los de 100 dólares, excepto tal vez verse mejor y tener una marca asociada a ellos», afirma Jay Duker, director de oftalmología del Centro Médico Tufts de la universidad del mismo nombre.


«Un significativa parte de lo que paga no es por la calidad de los lentes, es la marca», añade Reza Dana, director del servicio de cirugía refractiva y córnea de la Clínica del Ojo y el Oído de Massachusetts. El experto señala que producir lentes que ofrecen protección contra rayos ultravioletas dañinos «no es una tecnología muy cara». Y aunque gastar más puede darle monturas de mejor calidad, aquí también rige la ley de los rendimientos decrecientes.
Por unos 40 dólares, dice Duker, puede comprar un par de anteojos de sol que ofrecen 100% de protección contra los rayos ultravioletas. Si gasta unos 70 dólares debería poder conseguir gafas con lentes polarizados de buena calidad que reducen el resplandor. Más allá de eso, los beneficios médicos van disminuyendo bastante rápido.


(   También podemos llamar desde una cabina de teléfonos, ¿Por qué la gente se compra el último grito de teléfono móvil con el que además de llamar se puede conectar a Internet? ¿Por qué lo compra de Apple y no de fulanito perez, si ambos hacen lo mismo? ¿Por qué una mujer se compra un bolso de Louis Vouiton o un perfume de Channel? ¿Por qué un caballero se compra un Porsche o un Rolex?

Está claro que en el mercado podemos encontrar productos mas baratos que tendrán funcionalidades similares, y digo bien similares. Pero no nos engañemos, cuando uno se lo puede permitir se compra lo que le gusta y la moda es un criterio de compra muy importante para mucha gente.   )

5.-    Unas gafas baratas de la farmacia no son lo peor del mundo. Podrían ser suficientes para la mayoría de la gente en la mayoría de las circunstancias, dice Dana. «La principal razón por la que la gente usa anteojos de sol es para bloquear luz blanca (regular) y, desde ese punto de vista, las gafas baratas funcionan bastante bien». Y probablemente bloquearán la mayor parte de los rayos ultravioletas, agrega.


(  Si esas gafas han pasado todos los controles de calidad y al usuario le gustan como le quedan, pues porque no. Pero por favor, no banalizar este tema, en una óptica se pueden encontrar una variedad más importante tanto en precio como en modelos que en una farmacia.   )

6.-    Esos anteojos elegantes le cuestan mucho más de que lo que piensa. Si hace que sus gafas duren muchos años, eso no sería problema. ¿Pero quién hace eso? Las personas que desean productos de diseñadores desean la última moda cada año. Además están los pares que se pierden, se rayan en la playa, se rompen cuando uno se sienta encima sin querer. Personalmente, tengo que considerar las gafas de sol como productos desechables, y sospecha que no soy el único.


Con el correr de los años estas cosas suman. De hecho, se capitalizan. Incluso a un interés de, por ejemplo, 4%, 200 dólares durante 50 años se convertirían en 30,000 dólares.


KFL

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